viernes, 15 de noviembre de 2013

Usar las armas del enemigo

Hace unos meses venía el presidente Rafael Correa a Sevilla. En una conferencia en la Universidad Pablo de Olavide explicaba, con la brillantez del gran economista que es, la siguiente jugada maestra.

Ecuador tenía una inmensa deuda pública que devoraba ingentes cantidades de recursos necesarios para el desarrollo del país. Entonces el gobierno de Correa comenzó a insinuar que el país podría ir al default y no pagar. Calificó la deuda como deuda odiosa e ilegítima, explicó que primero sería la vida y el bienestar de los ecuatorianos y luego la deuda, se enfrentó abiertamente a las amenazas del FMI. Su alineación con los países antimperialistas del ALBA hizo que los medios de comunicación propagasen con gusto estos rumores, pensando que atacaban el proceso revolucionario. 

Sucedió entonces que los poseedores de títulos de deuda soberana, temerosos de perder su dinero, acudieron en masa al mercado secundario intentando venderlos a la baja, por el considerable incremento del riesgo, para recuperar al menos parte de su inversión. Y en ésto llegó el gobierno ecuatoriano, que previamente había recuperado el control político del Banco Central, y de manera secreta,  recompró un tercio de su deuda, pero un 70%  más barata y luego la abolió

Gracias al conocimiento del funcionamiento de los mercados financieros, Ecuador consiguió una quita del 70% con el proporcional ahorro de intereses, sin necesidad de negociar con ninguna troika, ni pedir rescates, ni acometer recortes, ni refinanciar. Todo perfectamente legal y respetando las reglas del juego. Una jugada maestra, a la altura de las que realiza George Soros para ganar millones hundiendo bolsas con movimientos especulativos, solo que para todo lo contrario.

Pues bien, hace unos días leo que activistas de Occupy Wall Street han comprado deuda personal, principalmente facturas sanitarias, por valor de 15 millones de dólares en el mercado secundario para luego abolirla y liberar a los deudores. A través de una campaña de sindicación de donativos llamada Rolling Jubilee, reunieron en un año la cantidad de 400 mil dólares, con los que compraron deuda por valor de 15 millones. Una proporción de 20 a 1. 

La lógica es la misma, personas que no pueden pagar sus facturas y compañías que acuden al mercado secundario a revender a la baja sus derechos de cobro. La lógica del mercado es que la compren compañías de recobro o "gestión de activos de difícil cobro", que con amenazas, presiones y embargos de rapiña intentan conseguir el dinero. Pero aquí es el pueblo organizado el que acude con el objetivo de liberar a las familias. 2.693 personas de todos los EEUU y Puerto Rico se han beneficiado de esta campaña, en un país en el que el 62% de las bancarrotas personales vienen por las facturas médicas, y donde no pagar éstas facturas equivale a no tener acceso al sistema de salud.

En España, la deuda de los hogares asciende a unos 800.000 millones de euros (de los que el 77% corresponde a deuda hipotecaria). Esto es un 800% más que en 1996 cuando Aznar entra a la presidencia. Intrigado por ver como se está comportando esta deuda en el mercado secundario, encuentro lo siguiente:

  
El mercado secundario de deuda privada español se denomina AIAF. Ahí se negocian distintos activos a corto, medio y largo plazo, entre los que destacan pagarés de empresas, bonos y obligaciones y las tres partidas que he recogido en la tabla. Hipotecas, bonos con deudas privadas titularizadas y las famosas preferentes. 

El caso de las preferentes es distinto, porque aquí la posición del afectado es la de acreedor, no la de deudor, pero lo traigo igual por el significativo incremento del volumen de negocio en el último año, fruto en parte de la presión social y las primeras sentencias judiciales. En cualquier caso lo dejo pendiente para un futuro análisis con mayor profundidad.

Respecto a las deudas en sí, vemos como la crisis ha hecho que los poseedores de deuda privada acudan masivamente al mercado secundario a venderla. Lógico a tenor de los sucesivos repuntes de la morosidad bancaria, por encima del 12%, en su máximo histórico.  Suponiendo el año 2011 un auténtico record de compraventa de estos activos.

Pero ¿Quien compra esta deuda? Decía Emilio Botín hace unas semanas en Nueva York que este era un momento fantástico para España porque estaba llegando dinero a espuertas. Efectivamente los fondos extranjeros están incrementando sustancialmente sus inversiones en España. Pero son un  tipo muy particular de fondo quien está realizando estas operaciones, los conocidos como fondos buitres. Fondos depredadores que vienen a la rapiña de un país en liquidación, a aprovecharse de las gangas, buscando descuentos del 50 o el 60% en activos tóxicos. 

Y entre estos activos, sus preferidos, además de las propiedades inmobiliarias, son las deudas, y en concreto las hipotecas. Dado que la draconiana legislación española hace que sea más sencillo evadir la muerte que a las deudas. Éstas son imprescriptibles y ni siquiera la insolvencia te libra de ellas. Por no hablar ya de la ley hipotecaria, donde ni el desahucio de la casa te libra de la deuda.

Es por eso que cualquier modificación de la ley hipotecaria, como la dación en pago, se ve como una amenaza tremenda por Bruselas y el propio gobierno, porque pone en riesgo los intereses de estos fondos extranjeros y su interés por el mercado español. Y por eso los decretos como los de la Junta de Andalucía para parar los desahucios son inmediatamente recurridos para dejarlos en suspenso.

Decía Mao que ninguna revolución triunfa sin usar las armas del enemigo. Y a veces parece mas sencillo comprender el funcionamiento de un fusil de asalto que de los mercados financieros. Pero no lo es, solo que lo hacen parecer complicado para que permanezcamos ignorantes a sus manejos. Recuerdo una conferencia del profesor Jose Luis Osuna en la que contaba como el juego del Monopoly estuvo prohibido en sus orígenes en los EEUU porque daba una versión peligrosamente simplificada y clara de la econonomía.

La deuda se puede abolir si se quiere, no consintamos que la pongan en manos de usureros internacionales, o cualquier día veremos como subastan España en Energy cual trastero tejano.  



miércoles, 6 de noviembre de 2013

Lo moderno, para Andalucía, es ser dependiente

El PSOE ahora quiere construir un bloque de izquierdas en España, porque ellos son modernos, mientras que IU, lamentan, está anticuada. Realmente les gusta la palabra "moderno". Deben tener un equipo de marketing electoral obsesionado con dar una imagen de dinamismo, juventud... y luego ponen de cabeza visible a Rubalcaba. Que cosas.

El caso es que no es la primera vez que venden el humo de la modernidad. Aquí en Andalucía, tras 35 años de gobierno social-liberal, se supone que ya hemos pasado por dos modernizaciones. Dos grandes procesos de desarrollo y convergencia con Europa, que iban a hacer que nuestra economía fuese competitiva. El último, la Segunda Modernización de Andalucía, lo lanzaron en 2001 y han tenido la prudencia de quitar el documento de la web de la Junta, no vayamos a recordar lo que prometían.

La cuestión es que tampoco debe de ser tan difícil sacar a Andalucía del atraso relativo. A diferencia de otras regiones del mundo que siempre han sufrido el subdesarrollo, Andalucía fue históricamente el motor económico de España y no es hasta comienzos del siglo XX y muy especialmente en la postguerra cuando comienza su atraso.


Y es que Andalucía fue la primera región industrializada de España. Donde se instaló el primer alto horno. Y durante el siglo XIX, el puerto español por donde entraba más algodón y carbón fue el de Málaga. Un temprano desarrollo industrial textil, siderúrgico y minero al más puro estilo inglés.

Sin embargo, la falta de recursos energéticos, la política arancelaria proteccionista y la estructura de propiedad de la tierra van a dibujar en el siglo XX un giro hacia una economía dependiente, subordinada a núcleos capitalistas lejanos, cuya función es exportar productos agrícolas, minerales y mano de obra, y en la última etapa servir de destino vacacional en verano.

En términos de convergencia real, nuestro PIB per cápita, que había sufrido el mismo proceso histórico que el resto de la economía, se ha estabilizado 25 puntos por debajo de la media nacional.


Y eso por no hablar de otros indicadores como el desempleo, que nos ofrece la tasa más alta de todas la regiones de la UE.

Cabría esperar de un pueblo que logra, tras muchas luchas y sufrimiento, la autonomía necesaria para gobernarse a sí mismo, que hubiese revertido esa situación, desarrollando un nuevo modelo económico que cambiase su posición subordinada, periférica, en la división internacional del trabajo.

Desde luego hemos tenido tiempo, 35 años de autogobierno, y dinero, 80.000 millones de euros solo en fondos europeos.


Pero no, no había voluntad o capacidad política, y nuestros sucesivos gobiernos social-liberales no han hecho otra cosa que profundizar el modelo económico de dependencia periférica. En todo caso sustituyendo el núcleo capitalista dominador del centro y norte peninsular por el centro y norte europeo. Poco más.

Andalucía necesita un nuevo modelo económico centrado en sectores con mayor valor añadido, como el biotecnológico, nuevas fuentes de energía y nuevos materiales, y tiene una juventud cualificada y capaz de hacerse cargo. Pero tiene que abandonar las cadenas del viejo modelo de economía dependiente y para eso hace falta voluntad política, por ejemplo para establecer una banca pública que financie este cambio, una nueva estructura de propiedad de la tierra, hoy anclada en el feudalismo, y una política de gasto público acertada, donde prime la inversión productiva y no de gestión.

Ya es hora de sacudirse de encima a los que defienden la modernidad solo como retórica vacía, y que los que saben hacia donde andar y tienen el valor de hacerlo, den un paso al frente, aunque sean unos antiguos.



viernes, 1 de noviembre de 2013

Los 12 días que ondeó la bandera roja en el Ayuntamiento de Sevilla

El movimiento cantonal en 1873, durante la I República, supone un hecho singular en la historia de España. Un momento de colapso institucional, económico y social, que genera una situación revolucionaria que ni sus propios artífices supieron bien cómo manejar.

Es una explosión efímera, en la mayoría de los casos solo dura unos días, por lo que la mayoría de los bandos y decretos aprobados no se llevaron a efectos por falta de tiempo, y en ese sentido el levantamiento cantonal resulta más interesante por lo que pudo llegar a haber sido que por lo que fue.

Es sin duda significativa la influencia que en el modelo cantonal ejerce la Comuna de París, proclamada en la capital francesa dos años antes, en 1871, y de la que copia la idea del federalismo desde abajo, desde el poder municipal, y entre otras cosas, también la simbología, como la bandera roja, que desde la Comuna es símbolo revolucionario.

En la ciudad de Sevilla, el republicanismo estaba muy polarizado entre conservadores y intransigentes-internacionalistas. Los primeros formados por la burguesía local copaban las instituciones de gobierno.

Las huelgas de 1873 y la presión social lograron mejoras para los trabajadores y que no se reintrodujeran los impuestos de consumos. En su lugar se impusieron contribuciones sobre signos externos de riqueza (caballos de silla, carruajes de lujo, consumo de carne), elevaciones de las cuotas industrial y territorial, y cuantiosos empréstitos a prorrateo entre 25 grandes capitalistas locales.

Esta situación fue respondida por un amplio cierre patronal y la emigración de parte de la gran burguesía. Según el consul francés de la época, muchos de los grandes industriales aprovecharon la huelga para suspender negocios que no podían prosperar por la deplorable situación del país, entre los que citó a “cinco grandes fundidoras, la importante fábrica de porcelana y numerosas fábricas de tejidos”. Miles de trabajadores serían lanzados al paro, lo que llevó al alistamiento de 10.000 voluntarios en las milicias republicanas. La exigencia de armas de estos voluntarios fue permanente desde el 11 de Febrero, ya que solo una cuarta parte de ellos aproximadamente estaban armados al principio.

El 24 de Junio el voluntariado formó retenes armados por la ciudad y requisó el armamento almacenado en la Maestranza. El gobernador se atrincheró en la fábrica de tabacos con la guarnición militar, guardia civil y carabineros, se produjeron enfrentamientos armados y se levantaron barricadas en la Macarena, Triana, San Lorenzo y Alameda. El día 27 se publica la orden de desarme del voluntariado y éste ocupa militarmente Sevilla a excepción de la fábrica de tabacos. Un millar de voluntarios intransigentes malagueños llega a Sevilla el 29. El día 30 se constituye una junta revolucionaria para el gobierno de la ciudad. Los líderes del movimiento son Carreró, pintor, Mingorance, barbero y Ariza, sombrerero. Los bandos dictados declaran la separación de todos los empleados municipales, la entrega de armas de fuego en manos de los particulares y una contribución de millón y medio de pesetas a los mayores contribuyentes, terminando con vivas a la república socialista. Horas después el gobernador compra a los voluntarios malagueños con seis cañones y 20.000 reales, aportados por republicanos conservadores, y aprovechando la desorganización de los alzados, dispersos por la ciudad, entra en el ayuntamiento con 50 hombres y apresa a la junta revolucionaria.

El reinstaurado gobierno desarmó a los batallones de voluntarios mas vinculados a los sucesos y se encarceló a 50 individuos. 700 comerciantes, banqueros e industriales firmaron un manifiesto agradeciendo al gobernador haberlos librado de “los horrores de la anarquía”, también se inició una campaña de donativos para pagar a los voluntarios leales y se intentó organizar un batallón de 1000 jóvenes de “familias acomodadas” en defensa “del orden y la propiedad”.

El día 17 de Julio, ante el colapso del gobierno central, salen emisarios de Madrid para insurreccionar y constituir cantones por todo el país. En Sevilla, en vista del movimiento, deciden el día 18 constituir el cantón pero dirigido por las fuerzas conservadoras y a pesar de la oposición del gobernador, para evitar que se diese por vía insurreccional, pero condenando “el más leve ataque a la propiedad y hasta el menor pretexto para turbar el orden”. A pesar de ello, el día 19 un pelotón de voluntarios libera a los intransigentes socialistas presos, a quienes una multitud acompaña por las calles. Ocupan el ayuntamiento y se constituye una comisión de salud pública. Munícipes y diputados huyen de la ciudad.

La Junta de Salud Pública adoptó las siguientes medidas: Se desestancaron los tabacos y se vendió al público con la rebaja de un tercio del precio las existencias almacenadas en la fábrica. Se estableció una contribución única que gravitara sobre la propiedad de cualquier clase que fuera. Se inició la recaudación de contribuciones extraordinarias a la burguesía local con visitas domiciliarias del voluntariado socialista. En lo laboral se aprobó garantizar el “derecho al trabajo como una extensión del derecho a la vida”. Se limitó la jornada laboral a 8 horas en todas las ocupaciones. Se prohibió que “las mujeres trabajen en los mismos establecimientos industriales donde lo verifiquen los hombres”, para evitar el reemplazo buscando reducir costes laborales. Y se aseguró la mas amplia libertad de negociación entre patronos y obreros, “pudiendo avenirse unos y otros como lo estimen conveniente”. Se declaró además propiedad del cantón a los bosques y se redujo a la mitad la renta de los arrendatarios rústicos y urbanos; Y para evitar el boicot económico se anunció “que los talleres y fábricas que se cierren y las tierras que no se cultiven, serán entregadas a quien los haga producir”.

Se acordó la extensión del cantón andaluz, para lo que partieron columnas de voluntarios intransigentes-socialistas a los pueblos. En Carmona, Ecija y Jerez, los núcleos intransigentes-internacionalistas habían sido neutralizados por el ejercito. En Carmona, una columna de 150 voluntarios estableció una junta revolucionaria, liberando a los 30 jornaleros que seguían presos desde la huelga de segadores. En Écija también se estableció una junta revolucionaria que solo duró tres días por las proximidad del ejército en La Carlota. Se formaron cantones también en Marchena, El Arahal, Paradas y Coria del Río. En Lebrija el cantón estuvo dominado por la burguesía local.

La columna de voluntarios sevillanos que partió a Jerez, el 21 de Julio, no pasó de Utrera, por un enfrentamiento con los vecinos exaltados por las autoridades locales, que exigían su derecho a nombrar una junta revolucionaria sin ingerencias externas. Al paso de la columna se inició un tiroteo desde las casas que dejó bastantes bajas y cientos de cantonales presos. Al día siguiente la llegada de refuerzos desde Sevilla logró la libertad de los presos, sin más enfrentamientos, que volvieron a Sevilla a defender la ciudad ante la amenaza de ataque del ejército. Dos Hermanas, Osuna y Morón se opusieron al movimiento cantonal.


El 28 de Julio las tropas del General Pavia, que salieron de Madrid el día 21 destino a Córdoba, comenzaron su asalto a Sevilla. Pavía rehusó cualquier negociación y eligió atacar por la parte mejor fortificada de la ciudad buscando un resultado previsiblemente cruento (el mismo lo llamó una calaverada militar). El ejército cuantificó 300 bajas en el ataque entre sus filas. La resistencia cantonal estaba mermada y desorganizada, solo los internacionales combatieron con convicción. Finalmente el día 30 ocupó la ciudad. Se desarmó a los voluntarios y se nombraron 200 Guardias Civiles. Se sucedieron las detenciones, ejecuciones y destierros, muchos de ellos con destino a las Islas Marianas en el Pacífico.

*Fuente principal: Republicanismo y Anarquismo en Andalucía; A. López Estudillo